Comer fuera de casa engorda. Es lo que solemos escuchar, pero esto no necesariamente tiene porque ser cierto si almorzamos o cenamos en restaurantes. La clave es apostar por una alimentación balanceada.
En el libro “Como perder peso y ganar salud”, de Martina Miserachs y Anna Burnat, los autores brindan unos consejos para comer en restaurantes sin aumentar de peso.
1. Italiana. Sí, se puede ir a una pizzería y seguir la dieta. Por ejemplo, es bastante fácil elegir primero una ensalada (sin quesos, ni salsas) y un carpaccio de segundo.
Si vas al mediodía y con más gente, también es una buena idea compartir una pizza en la que el ingrediente principal sean las hortalizas. Es mejor evitar las que llevan embutidos e ingredientes grasosos como el queso.
Otra alternativa es compartir un plato de pasta con hortalizas, setas o mariscos, sin queso. En cuanto al postre, lo más adecuado es pedir fruta o un sorbete de limón.
2. Asiática. En un japonés la que aporta menos calorías es la sopa de miso, el combinado de sushi y sashimi.
Es importante saber que la mayoría de algas contienen mucho yodo. Otra opción es la sopa de fideos con hortalizas.
En los restaurantes chinos hay que evitar cualquier frito o salteado. Es mejor comer un plato de hortalizas con carne o mariscos a la plancha, una sopa de vegetales o ensalada, o una pequeña guarnición de arroz en lugar de pan chino.
3. Francés. La cocina francesa acostumbra a ser muy rica en grasas, pues son grandes amantes de la mantequilla, las cremas y las salsas.
Un primer plato de ensalada de judías verdes (vainitas) es el clásico que ofrecen la mayoría de restaurantes. De segundo caracoles, ostra o un marisco, cualquiera de estas opciones aporta pocas calorías.
También puedes elegir una tortilla rellena de verduras, un filete a la plancha sin salsa y con guarnición de hortalizas o papas asadas.
4. Fast Food. Incluso en un fast food puedes encontrar opciones pocos calóricas. Si vas a uno de estos locales, opta por una ensalada de vegetales frescos con aliño de aceite y vinagre, o por un gazpacho.
Si tienen wraps de ternera o pollo sin tocino, puede ser un buen segundo plato. También puedes pedir una hamburguesa simple (sin queso) ni tocino, pero sí con pepinillo, lechuga y tomate.
Las hamburguesas de vegetales o de pescado son una gran alternativa, y si en lugar de estas comemos un trozo de pechuga o pavo a la parrilla, mucho mejor.
Las papas fritas aportan muchas calorías, por lo que es mejor elegir otros acompañamientos como una ensalada o unos tomates cherry.
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